Yasí Berá coronará a su soberana el día sábado 14 de enero en el Anfiteatro
Katia Antonella Wagner Barrios, es la elegida para representar a la comparsa de la luna brillante, a la cual se incorporó desde muy pequeña.
“Siempre veía el carnaval y me encantaba porque era todo muy vistoso y había mucha fiesta, mucha alegría. Me cuentan -porque era muy chiquita- que un verano, de la nada, dije: yo quiero bailar en la comparsa. A último momento mi mamá y mi madrina salieron corriendo a Yasí-Beracitos a pedir un diseño y bordaron rapidísimo. Mi traje era una pollerita, un corpiñito todo rojo y una corona de flores blancas con un detalle rosado. Dicen que esa noche yo quería salir con Yasí Berá, con Carú Curá… con todos. Yo lo que quería era bailar. Esa era la pasión” recordó Katia.
Ella contó sobre la relación heredada que tiene con Esquina Foot Ball Club y Yasí Berá: su bisabuela y otros familiares participaron de la Comisión de E.F.B.C, su abuelo era jugador del equipo de básquet del club y su madre fue bailarina durante muchos años, hasta que se retiró y luego, juntas, volvieron a bailar en la celebración por el quincuagésimo aniversario de la comparsa. “Fue un sueño, para mí, bailar con mi mamá” expresó con una enorme sonrisa estampada en su rostro y la voz impregnada de amor.
Es imposible no pensar en todos los sentimientos que produce el carnaval. A tal punto que las familias se unen y festejan enlazadas por una pasión común.
La Reina de la roja y negra, relató cómo fue el emocionante momento en que le preguntaron si aceptaría serlo.
“Me llegó el audio de Cristian, a las siete y media de la mañana, un miércoles. Yo estaba estudiando con una amiga y mientras iba escuchando el audio pensaba: me va a proponer que sea figura. Y cuando me dijo que me proponía ser reina de la comparsa me quedé dura.
Terminé de escucharlo, le conté a mi mamá y al rato me llegó un audio de mi abuela, totalmente emocionada. En ese momento me quebré y todavía ni siquiera había confirmado nada.
Yo lloraba y lloraba y mi amiga, preocupada, me preguntó si había pasado algo en mi familia. Fue lo primero que se imaginó, con toda esa situación…”
Y sí, realmente, a la familia de Katia le pasó “algo”: recibieron la mejor noticia que el carnaval pudo haberles traído y, a partir de allí, comenzó el camino emprendido para que su reina brille, ocupándose de cada detalle.
Así se vive el carnaval en Esquina. De este modo lo transitan las familias, porque esta cultura es un legado que se transmite de generación en generación.
Fuente: https://sites.google.com/view/esquinaescarnaval/noticias/katia-wagner-barrios