Convocados por el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, los sacerdotes de la diócesis llevarán adelante la Misión de la Reconciliación en el marco del Año Jubilar de la Esperanza. La totalidad del clero diocesano y religioso misionará el lunes 2 de junio en el departamento de Lavalle, continuará el martes 3 en Goya y finalizará el miércoles 4 en Esquina.
Durante la misión, los sacerdotes visitarán enfermos, hospitales y sanatorios. Asimismo, se ofrecerá el sacramento de la Reconciliación en todas las parroquias, y la misa de clausura se celebrará en la Catedral —templo jubilar— a las 19:00 horas.
La Misión de la Reconciliación, que se iniciará en el Decanato Paraná, tiene como objetivo ofrecer el sacramento de la Penitencia dentro de una celebración comunitaria, favoreciendo así que el jubileo sea vivido como un tiempo de gracia en cada uno de los departamentos, especialmente en torno a los templos jubilares. Esta misión busca expresar, junto a las comunidades locales, dos signos distintivos del jubileo: la Peregrinación y la Reconciliación.
El martes por la mañana, los sacerdotes se dirigirán a los departamentos para visitar a personas imposibilitadas de participar en la celebración vespertina. Las visitas se realizarán en hospitales, sanatorios, cárceles, comisarías, hogares de enfermos y asilos de ancianos. Por la tarde, si quedan visitas pendientes, continuarán; sin embargo, el foco estará puesto en la celebración comunitaria del perdón.
Peregrinación al Templo Jubilar
Las comunidades y grupos de fieles peregrinarán desde sus parroquias hasta la Catedral, donde serán recibidos por el obispo y los sacerdotes para celebrar juntos la Eucaristía en el templo jubilar.
El Papa Francisco —recientemente fallecido— animó a los sacerdotes a «mantener viva la esperanza». “Sean ustedes mismos, para todos, signos de esperanza, una presencia que alimente palabras y gestos de paz, fraternidad y respeto”, expresó.
Las confesiones se llevarán a cabo en las parroquias correspondientes y en la Catedral. Para más información, se recomienda a los fieles consultar con sus respectivos párrocos y coordinar las visitas a los enfermos.