Los árbitros esquinenses Jonathan Ledesma, Ramón Ledesma y Dionisia Pereira compartieron la experiencia con sus pares de la ciudad, en las últimas jornadas de capacitación y pruebas físicas realizadas en Resistencia (Chaco) y en Corrientes Capital, en el marco del programa de formación y evaluación que impulsa la AFA en conjunto con la UNNE.
El primer desafío fue en Resistencia, donde debieron superar exigentes pruebas físicas para poder aspirar a dirigir torneos regionales y federales. La evaluación incluyó un examen teórico de reglamento, pasadas de velocidad de 45 metros en 10 segundos y un test de resistencia con 40 repeticiones de 75 metros en 20 segundos. “Fue muy exigente, pero nos veníamos preparando en el predio de San Martín. Es un paso importante para poder seguir creciendo”, relató Jonathan.
Posteriormente, en Corrientes Capital, participaron en una jornada de capacitación y entrega de indumentaria oficial para árbitros de toda la región. Allí, además, se formalizó el acuerdo entre AFA y la Universidad Nacional del Nordeste para la continuidad de estudios arbitrales.
De Esquina viajaron diez árbitros, aunque solo tres realizaron la prueba física, ya que uno de los convocados no pudo presentarse por motivos laborales. Para Pereira, única mujer árbitra en el plantel local, la experiencia tuvo un sabor especial: “Me sentí una más dentro del grupo, no hay diferencias entre varones y mujeres. Las pruebas fueron iguales para todos, lo que demuestra el profesionalismo que se busca en el arbitraje”.
Ramón Ledesma destacó el acompañamiento de la Liga Esquinense de Fútbol y el Municipio, que colaboraron con los traslados: “Sin ese apoyo hubiese sido difícil participar en forma grupal. Es importante que la Liga apueste por la capacitación de sus árbitros”.
Además, los colegiados remarcaron que este tipo de instancias abren puertas al futuro. “Queremos llegar a dirigir torneos federales, pero también formar escuela arbitral en Esquina. Antes no teníamos estas oportunidades y hoy estamos en otra etapa”, comentó Jonathan, quien además cursa estudios para recibirse de instructor internacional.
Por otra parte, días antes del viaje, los árbitros realizaron una capacitación abierta para clubes locales sobre las nuevas reglas de juego. “Fue fundamental, porque los cambios fueron bruscos y queríamos que jugadores y cuerpos técnicos comprendan cómo se aplican dentro de la cancha”, explicó Ledesma.
Finalmente, los árbitros reflexionaron sobre el rol que cumplen en el fútbol local, muchas veces cuestionado: “Sabemos que estamos expuestos al error, pero trabajamos con profesionalismo y responsabilidad. Lo importante es seguir creciendo y evitar que la violencia se meta en la cancha. El fútbol es deporte, no agresión”.
Con esfuerzo, compromiso y preparación constante, los árbitros esquinenses demuestran que el arbitraje local atraviesa un proceso de crecimiento y profesionalización que tiempo atrás parecía inalcanzable.

