La sexta fecha del Torneo Clausura 2025 en la Liga Esquinense dejó sensaciones encontradas: por un lado, Berón de Astrada goleó y se consolidó como líder absoluto; por otro, la jornada se vio empañada por un episodio de violencia que obligó a suspender los partidos en cancha de San Martín.
En Libertador, Berón de Astrada fue contundente y venció 3 a 0 a Sportiva con goles de Isaías Antenucci, Federico Ojeda y Bautista Niño. Este último, sin embargo, vio la tarjeta roja por doble amarilla. Con este triunfo, el equipo se afianza en lo más alto de la tabla del torneo Clausura 2025.
En contraste, el partido entre Submarino y San Roque fue interrumpido a los 42 minutos del segundo tiempo tras una agresión al árbitro Nicolas Martínez, por parte de un jugador de San Roque. El equipo de San Roque ganaba 1 a 0 con gol de Diego Miño, quien luego fue expulsado tras la polémica jugada que desató el conflicto: un penal a favor de Submarino que generó la reacción.
La agresión forzó a la terna arbitral a retirarse del campo, lo que derivó en la suspensión no solo del encuentro, sino también del siguiente partido programado entre San Martín y Foot Ball. Ahora será el Tribunal de Disciplina quien deberá decidir cómo se resuelve el encuentro suspendido y la Liga cómo se reprogramará el partido pendiente.
“Quimi” Tognola, secretario de la Liga Esquinense de Futbol, repudió enérgicamente los hechos:
“Tenemos que erradicar la violencia, no solo del fútbol sino de la sociedad. No puede ser que una decisión arbitral termine así. Fue un penal claro, pero aunque no lo fuera, nada justifica agredir al árbitro.”
Tognola también confirmó que el árbitro agredido sufrió un golpe en la boca y un fuerte impacto emocional.
La Liga respalda la suspensión y analizará medidas disciplinarias ejemplares. El mensaje fue claro: la violencia no tiene lugar en el deporte.
Berón de Astrada disfruta de su momento en lo más alto del torneo, pero el foco está puesto en que el fútbol vuelva a ser una fiesta y no una escena de violencia.



