POLICIALESPROVINCIALES

Cerca de 150 policías buscaban a nene desaparecido en zona rural

Loan tiene cinco años y habría desaparecido el jueves tras buscar naranjas en un monte cerca de la casa de su abuela. Estaba con un tío, una mujer, tres primitos y un amigo de la familia. «Se perdió», dijeron los adultos. Hay rastrillajes con perros, caballos y utilización de drones.

La repentina desaparición de un nene de cinco años en una zona rural de la localidad de 9 de Julio, ubicada a 175 kilómetros al sur de la ciudad de Corrientes, congregó a decenas de policías para realizar un enorme rastrillaje en su búsqueda.

El chico llamado Loan Danilo habría desaparecido luego de ir a un monte a buscar naranjas junto a un tío, tres primitos, una mujer y un amigo de la familia, según reveló su mamá en declaraciones públicas.

Los tres adultos resultaron demorados para su indagación y porque las autoridades habrían detectado algunas incongruencias en la versión de que el niño «se perdió».

No obstante, no existían elementos contundentes para orientar la pesquisa hacia otra hipótesis que no sea la de una supuesta desaparición accidental.

Loan estaba de visita en la casa de la abuela paterna en el paraje El Algarrobal y anteayer notificaron su desaparición ante la Policía. Poco a poco, la zona fue llenándose de efectivos en patrulleros, a caballo, con perros y drones.

Bajo un manto de incertidumbre transcurrió la noche sin novedades sobre el paradero del nene que vestía un pantalón y una remera mangas cortas.

Ayer, pasado el mediodía, hallaron una zapatilla atascada en el barro junto a huellas que serían suyas.

En este sentido, una hipótesis indicaría que el pequeño podría estar deambulando sin rumbo.

La distancia entre la vivienda y el sitio donde fueron por las naranjas sería de aproximadamente 300 metros.

La familia del menor denunció la desaparición el jueves a la tarde cuando llamaron a la comisaría local. Esas personas hablaron con la Policía para sostener que el chico fue visto por última vez entre las 14:30 y las 15, después de ir a buscar naranjas a un monte cercano.

Desde ese momento, la fuerza de seguridad comenzó a montar un dispositivo de búsqueda con personal de la comisaría local, en lo inmediato, y apoyo de efectivos de las dependencias más cercanas.

A la vez, pobladores que de a poco sabían la noticia decidieron ayudar por su cuenta con recorridas a pie y a caballo en la zona de campos, montes y esteros que se extendieron toda la noche del jueves y ayer a la madrugada.

La casa de la abuela del niño donde estaba de visita se encuentra ubicada a unos cinco kilómetros del casco urbano de 9 de Julio.

Amplio

Al amanecer del viernes a la búsqueda estaban plegados alrededor de 150 efectivos dependientes de la Unidad Regional II con asiento en Goya.

Policías de la Unidad Especial de Seguridad Ecológica y Rural, la División Drones y más tarde la División Canes de la ciudad de Paso de los Libres fueron diseminados a varios kilómetros a la redonda del punto donde habrían visto por última vez a Loan.

El sitio queda bastante lejos del cruce entre las rutas nacionales 12 y 123, en un área de llanuras, esteros y montes.

La Unidad Fiscal de Recepción y Análisis de Casos de la ciudad de Goya dispuso una serie de medidas preventivas.

En este sentido demoraron a los tres adultos que habrían tenido contacto con el nene antes de ser declarado desaparecido. Una de esas personas es tío del niño.

«Él estaba con tres personas mayores. Mi marido le dejó ir de confianza y no sé qué pasó», expresó María Noguera, mamá de Loan, en declaraciones a Radio Dos.

«Capaz alguien lo vio solito y lo agarró; yo creo que lo único que queda es buscar casa por casa», manifestó la mujer.

El chico tomaba naranjas con tres personas mayores y tres menores, que son sus primitos, y en un momento determinado quiso ir con su papá, se alejó de ellos y desapareció. Eso es lo que tales testigos manifestaron a las autoridades.

«Mi marido no se fue con Loan al monte, mi hijo se fue con su tío, un amigo de su tío, una señora y tres primitos», contó María.

Asimismo, sobre qué le contaron las personas que estaban con Loan, la madre, explicó: «Dicen que él quiso irse con su papá, que agarró una naranja y empezó a caminar, él no conoce el camino, y cuando ellos se dieron cuenta ya había desaparecido».

Las esperanzas de hallarlo sano y a salvo no desvanecían a pesar de la segunda noche que el niño debería afrontar en soledad, sin comida, agua, en completa oscuridad y descenso de la temperatura.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba