Luego de la audiencia ambiental convocada por la Justicia, en la que se ordenó la clausura del vertedero municipal y se exigió un plan urgente de acción, el Municipio de Esquina puso en marcha un operativo integral de saneamiento y reordenamiento del predio. En una entrevista con medios locales, el asesor legal del municipio, Dr. Ángel Ramírez, detalló los avances del programa y el trabajo articulado entre distintas áreas del gobierno local y provincial.
“Esta medida judicial pudo haber sido tomada como algo negativo, pero nosotros la entendimos como una oportunidad para abordar un problema real que afecta tanto al ambiente como a la calidad de vida de los vecinos”, afirmó Ramírez.
La intervención surge luego de que el Ministerio Público solicitara la clausura inmediata del vertedero, prohibiendo tanto el ingreso de residuos como de personas al predio. La situación, marcada por condiciones insalubres y riesgos para la comunidad, motivó una reacción coordinada entre el Ejecutivo municipal, la Justicia y vecinos del área afectada.
Actualmente, se está ejecutando el cerramiento perimetral del predio –de unas 16 hectáreas– con monitoreo de seguridad las 24 horas. “Uno de los primeros pasos fue impedir el ingreso de personas no autorizadas y de animales, algo que generaba serios conflictos sanitarios”, señaló el asesor legal.
Además, ya se presentó ante el juzgado el equipo técnico encargado de realizar el estudio de impacto ambiental, proveniente de la provincia de Corrientes y con experiencia en trabajos similares en Chaco y Formosa. Este informe será clave para elaborar el Plan Integral de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (GIRSU) que debe ser entregado en un plazo de 60 días.
Ramírez destacó que el plan no se limita a la clausura del basural, sino que incluye un enfoque comunitario: separación en origen, recolección diferenciada, compostaje, instalación de puntos verdes y articulación con instituciones educativas como la Escuela Técnica, cuyos alumnos elaborarán composteros.
“Un dato importante: cerca de 40 toneladas mensuales de residuos podrían dejar de ir al vertedero si se separan correctamente en origen y se canalizan a través de la cooperativa 247”, explicó el funcionario.
También se trabaja en la recuperación de otros predios afectados, como el basural de Santa Librada y terrenos en el fondo del barrio Moreno, con vistas a su futura urbanización.
Además de las acciones técnicas, el Municipio solicitó al Concejo Deliberante la declaración de emergencia ambiental, lo que permitiría liberar fondos para infraestructura y cubrir la parte del presupuesto que no cubre la provincia.
Finalmente, Ramírez enfatizó que esta política debe sostenerse en el tiempo, más allá de los cambios de gestión: “Es una cuestión que debe convertirse en política de Estado. No se puede interrumpir un proceso tan importante porque el problema de los residuos no desaparece, se transforma”.


