Durante el último tiempo, Gregory Bovino se ha transformado en una figura de alto perfil en Estados Unidos. Líder de la Patrulla Fronteriza, participó en operativos en ciudades santuario contra inmigrantes indocumentados en distintas zonas del país norteamericano. Al repasar su historia familiar, resalta un hecho que vivió su padre y que fue clave para forjar un carácter por el que destaca en su tarea policial.
Gregory Bovino nació en 1970 en San Bernardino, California, ya que su padre, Michael, prestaba servicio militar en una base ubicada allí. Sin embargo, dos años después la familia se mudó a Blowing Rock, un pequeño pueblo en la zona montañosa de Carolina del Norte.
Con sus dos hermanos menores, Natalie y Nicholas, tuvo una infancia tranquila. Todo cambió en 1981, cuando su padre protagonizó un accidente automovilístico que derivó en la muerte de una joven, según documentos obtenidos por el Daily Mail.
Según relató la hermana de Bovino al medio citado, que publicó esta historia como una exclusiva, Michael salió una noche del bar del que era propietario, el Library Club, ebrio y fue parte de un accidente vial en el que embistió a un auto. El otro vehículo lo conducía Janie Mae Mitchell, una mujer de 26 años que falleció a causa del hecho.
La investigación policial reveló que el hombre de 37 años iba alcoholizado y tenía botellas vacías en su auto. Acusado de homicidio involuntario, el hombre finalmente se declaró culpable de muerte causada por un vehículo motorizado. Como consecuencia de esto, recibió una pena excarcelable de un año de prisión y se comprometió a realizar un tratamiento por su alcoholismo.
Luego de la condena, según Daily Mail, Michael se vio obligado a vender el bar por su situación económica y la familia comenzó a vivir otra realidad. En un contexto difícil, Gregory se aferró a la caza y a deportes de contacto, pasiones que su padre le había inculcado.
Uno de los primeros pasos fue el boxeo, disciplina que Bovino comenzó a practicar cuando su padre le compró unos guantes. Luego, participó en el equipo de lucha libre de su escuela secundaria y hasta compitió en triatlones.
Con toda una vida en Carolina del Norte, el ahora oficial llegó a adentrarse en el bosque bajo la nieve solamente para seguir el rastro de un ciervo. Sus experiencias familiares y su pasión por deportes de contacto y otras disciplinas similares terminaron de formar su personalidad para darle lugar a la figura que hoy lidera la Patrulla Fronteriza.
El actual jefe de la Patrulla Fronteriza tiene 29 años de servicio en la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés). Bajo la administración Trump, tomó mucho protagonismo y actualmente es la cara de las operaciones que realiza la fuerza federal en distintas ciudades.
Luego de polémicas operaciones para capturar migrantes en Boston y Chicago, actualmente Bovino se encuentra nuevamente en Carolina del Norte, el estado donde creció. Desde el fin de semana, las redadas se concentran en Charlotte y se trasladarán en las próximas horas a Raleigh.

