El candidato a diputado nacional libertario José Luis Espert aseguró este jueves que el gobierno de Javier Milei no hará cambios drásticos en la política económica por el resultado que consiga el domingo en las elecciones locales de la provincia de Buenos Aires, sobre todo si es desfavorable para su partido.
Esto en medio de las modificaciones que ya implementó la Casa Rosada esta semana, para intervenir a través del Tesoro en el mercado cambiario, cuando la suba del dólar lo movía hacia el techo de la banda. Asimismo, el miércoles, el riesgo país quedó en torno a los 900 puntos -el más alto en cinco meses- y por el momento no hay encuestas que den un claro ganador para los comicios bonaerenses.
“Acá volantazo no va a haber, independientemente del resultado”, aseveró Espert en Radio Mitre, para intentar despejar la incertidumbre creciente sobre el programa que comandan Milei y su ministro Luis Caputo, que emprendieron viaje rumbo a Estados Unidos, con la expectativa de volver al país el sábado.
“Lo que está ocurriendo de parte del equipo económico es algo muy simple y quiero ser preciso en esto: nosotros tenemos un Congreso que se está comportando, y voy a ser enfático, de manera destituyente”, dijo también el actual diputado nacional, que buscará renovar su banca en la elección del 26 de octubre, y que preside la Comisión de Presupuesto de la Cámara baja con múltiples cuestionamientos de la oposición.
El dirigente, amigo de Milei, añadió: “El programa económico -está en la Constitución, no en las nubes de Marte- lo fija el gobierno elegido por el pueblo. Y el programa económico de este presidente tiene su centro de gravedad en el déficit cero, para que no haya emisión, inflación, y para destruir la pobreza, bajarla a lo mínimo posible. Nuestro programa es para luchar contra la pobreza que dejó el maldito kirchnerismo. Y desde el Congreso no hay un solo proyecto que no vaya contra el superávit fiscal, central para reducir la pobreza. Por lo tanto, los mercados toman nota de esto y dicen ‘cubrámonos por si acaso, porque acá hay un Congreso destituyente y elecciones críticas en la Provincia’”.
Después de este análisis, bien en línea con la Casa Rosada, Espert señaló que “mientras dure esta incertidumbre, se tomarán medidas absolutamente transitorias”, e insistió: “Pero volantazo no va a haber. Porque, desde mi punto de vista, no ha habido volantazo en un sentido, por lo tanto no justifica un volantazo en el otro».
Sin embargo, dejo una ventana abierta. “Puede haber algún ajuste, pero nada más que eso”, avisó.
Por otro lado, Espert le bajó el tono a las versiones de que hubo una baja concurrencia en el acto libertario de cierre de campaña para la elección del domingo, que se hizo el miércoles por la noche en Moreno, con el Presidente en el escenario.
“Nosotros estamos contentos con la gente que fue, el clima…”, señaló. “Me solidarizo con el periodista que recibió un botellazo, fue un hecho aislado, afortunadamente. No hubo aquel infierno que en algún lugar nos sugirió Axel Kicillof y su ministro de Seguridad, [Javier Alonso], tratándonos de meter miedo de que no podíamos hacer un acto en la Provincia, como si fuera de ellos”, dijo el diputado, que estuvo presente en el evento.
Además, lo definió como un “muy lindo acto, muy cálido, con muy lindos discursos de parte de los que los hicieron, y mucho calor”. Los organizadores fueron, además del armador Sebastián Pareja, su terminal en Moreno, el diputado provincial Ramón “Nene” Vera, un puntero y experonista, que se encargó de movilizar a la gente que nutrió el público y cuya hija, la médica Andrea Vera, lo incitó para meterse en las aguas libertarias.
“El del domingo es un resultado ajustado, vamos a ver qué pasa. Estamos contentos, independientemente del resultado, dado el punto de partida de La Libertad Avanza, que arrancó en 2023. Tenemos muchísimo para ganar, vamos a meter un montón de concejales, de legisladores provinciales… Así que lo importante, más allá del triunfo, es que vamos a meter un montón de defensores de la libertad en municipios y en la Legislatura, para dar la contrabatalla cultural”, planteó Espert.