Homenaje a la Hermana Elba: Monseñor Adolfo Canecin presidió la misa de cuerpo presente
Este martes, en la Parroquia Santa Rita de Esquina, Monseñor Adolfo Ramón Canecin presidió la misa de cuerpo presente en honor a la Hermana Elba, miembro de la Congregación del Divino Salvador, destacada por su dedicación misionera y su compromiso con la evangelización. La religiosa falleció a los 100 años, dejando un profundo legado en la comunidad.
Durante la ceremonia, Monseñor Canecin compartió reflexiones sobre la vida de la Hermana Elba, recordando su incansable labor misionera y su carisma inspirado en Mamá Antula. «Siempre preocupada por llevar la palabra de Dios, era una mujer que no se detenía, siempre con una sonrisa y una actitud de servicio», expresó. El obispo también destacó su devoción por Santa Teresita del Niño Jesús, y citó una de sus frases favoritas: “Pasaré mi cielo haciendo el bien en la tierra”, que reflejaba su entrega al prójimo.
Monseñor recordó que, a pesar de no haber podido acompañarla en su última celebración de cumpleaños, quiso enviarle un mensaje. Ahora, sus restos serán trasladados a Resistencia, Chaco, donde recibirán sepultura en el Cementerio Parque Monte Alto, según lo dispuesto en su testamento, que fue leído durante la misa por el párroco José Ortiz.
La comunidad de Esquina se despidió con afecto de la Hermana Elba, recordando su vida dedicada a Dios y su labor incansable en la evangelización. «Que su recuerdo nos inspire a valorar no solo las obras sociales, sino también la profunda consagración a Dios que motivó su entrega a los pobres», concluyó Monseñor Canecin.