Este lunes 10 de febrero, en el marco de un nuevo aniversario de la ciudad de Esquina, se llevó a cabo la inauguración de un monolito en homenaje al legendario barco «Pinin». El acto tuvo lugar en la costanera, frente al Aljibe, y contó con la presencia de autoridades locales, vecinos y familiares.
El evento fue encabezado por el intendente municipal Hugo Benítez, acompañado de autoridades provinciales y locales. Durante la ceremonia, se compartieron emotivos recuerdos sobre la historia del «Pinin».
La señora Estela Mergen rememoró su vida a bordo de la embarcación, mientras que el músico local «Tuly» Neironi interpretó su canción Mi Viejo Pinin, inspirada en la nostalgia de un ícono esquinense que, lamentablemente, no pudo ser restaurado ni conservado como museo acuático.
Un símbolo de la historia de Esquina
El monolito cuenta con una placa conmemorativa que expresa:
LA MUNICIPALIDAD Y EL PUEBLO DE ESQUINA
RINDE HOMENAJE AL «PININ»,
QUERIDO BARCO QUE SURCARA ESTAS AGUAS POR MÁS DE UN SIGLO Y FUERA UN SÍMBOLO Y POSTAL DE ESTAS ORILLAS Y ESTE PUERTO. INSPIRÓ A POETAS, MÚSICOS Y PINTORES, PERO SOBRE TODO QUEDÓ PARA SIEMPRE EN EL CORAZÓN DE LOS ESQUINENSES.
10 DE FEBRERO DE 2025
«PININ»
Fue una goleta construida en España y botada en 1855.
Llegó a Buenos Aires en 1857, transportando a la familia Cincotta, inmigrantes italianos.
El buque se dedicó al comercio en el río Paraná, remontándolo con mercaderías desde Buenos Aires hasta Paraguay y viceversa. También tocó los puertos de Uruguay y, por mar, llegó hasta Ushuaia.
A comienzos del siglo XX se le instaló un motor, cuya hélice se conserva en este sitio.
Fue el primer barco capitaneado en el litoral por una mujer.
La familia Mergen lo timoneó hasta 1966, cuando quedó para siempre atracado en esta costa, donde lentamente se fue hundiendo, al igual que quedaba eternamente en el recuerdo de Esquina.
Reseña histórica del «Pinin» (Portal Sur)
El «Pinin» fue una goleta construida en España y botada en 1855. En 1857 llegó a Buenos Aires transportando a la familia Cincotta, inmigrantes italianos. Durante décadas, el barco se dedicó al comercio en el río Paraná, transportando mercaderías entre Buenos Aires y Paraguay, además de tocar puertos de Uruguay y llegar por mar hasta Ushuaia.
A comienzos del siglo XX, se le instaló un motor, cuya hélice se conserva actualmente. El «Pinin» fue el primer barco capitaneado en el litoral por una mujer y permaneció en actividad hasta 1966, cuando quedó atracado en la costa de Esquina. Con el tiempo, se fue hundiendo lentamente, quedando para siempre en la memoria de la ciudad.
El puerto de Esquina y su legado náutico
Desde el siglo XIX, el puerto de Esquina ha sido un punto clave en la navegación y el comercio regional. Buques de pasajeros y carga, como el Asunción, Esquina, Goya, Ciudad de Rosario, Walter Daniel, Las Marías y Pochito D, formaron parte del tráfico fluvial. En este contexto, el «Pinin» destacó como un símbolo de la identidad esquinense, dejando una huella imborrable en la historia local.
Video y fotos Delfi Paré
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