A once días de las elecciones nacionales, Provincias Unidas cierra esta tarde su campaña en la ciudad de Buenos Aires con un acto en el estadio Obras. Los seis gobernadores fundadores respaldarán las candidaturas de Martín Lousteau (Diputados) y Graciela Ocaña (Senado) pese a que, originalmente, se mostraban reticentes a apoyar listas por fuera de sus distritos.
En el mítico estadio porteño están presentes Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Ignacio Torres (Chubut), Martín Llayrora (Córdoba), Carlos Sadir (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes). También los candidatos a diputados de Córdoba, Juan Schiaretti, y de la provincia de Buenos Aires, Florencio Randazzo y Margarita Stolbizer. A estos últimos también brindarán su apoyo los fundadores del armado federal.
Ocaña fue la encargada de abrir el acto. “Cuando hablamos con los jóvenes nos dicen que quieren estudiar, pero se encuentran con una universidad pública que hoy está desfinanciada. Nos dicen que buscan su primer trabajo, pero no lo consiguen porque no hay oferta laboral”, comenzó la dirigente de Confianza Pública. Denunció también la dificultad de los profesionales para cubrir gastos mensuales y acceder a su propia vivienda, además de los bajos haberes de los jubilados y el acceso restringido a los medicamentos. A partir de ese diagnóstico, llamó a votar por un cambio y construir una Argentina sin corrupción y sin ajuste a los sectores vulnerables como jubilados y discapacitados.
A su turno, Lousteau subrayó que “hay otra manera, sin gritos y sin odio”. “No es agrandando el estado ni desmantelándolo. Es gestionándolo bien”, planteó en línea con la reivindicación que suelen hacer los fundadores de Provincias Unidas de su experiencia en gestión y gobierno. Al igual que su compañera en la boleta porteña, aseguró que la deuda está asfisxiando a las familias y cuestionó el atraso cambiario y su impacto para los exportadores argentinos. “Provincias unidas es una declaración de principios: la honestidad y la capacidad de gestión tienen que ser la premisa básica para construir todo lo demás. Es desde esta visión, desde esta unión en todos los rincones del país que vamos a seguir construyendo un futuro que sea justo, federal y más humano”, concluyó en un breve discurso de poco más de cinco minutos.
Randazzo también reivindicó la experiencia de los dirigentes del espacio, subrayó el rol de la política para atender a las demandas de la gente y reforzar la producción el trabajo, la educación y la infraestructura. Capitalizó su pasado como exministro de Transporte para reclamar por la restitución del servicio ferroviario, además de insistir con la continuidad del mantenimiento de la red vial, un reclamos que se oyó en los sucesivos actos públicos de los gobernadores.
Al término de las alocuciones de los candidatos, los gobernadores subieron al escenario para encabezar un conversatorio. “Este espacio va a demostrar que la Argentina tiene futuro”, comenzó Llaryora, que lanzó críticas contra el gasto público del kirchnerismo y la política económica libertaria y el desempleo que, entiende, es consecuencia del plan de gobierno del oficialismo. Se posionó, en este sentido, como una opción intermedia: “Creemos que hay que tener tanto mercado como sea posible, pero tanto estado como sea necesario”, planteó y, tal como hizo en Jujuy cerró con un lema tajante: “La Argentina será federal o no será nada”. A diferencia de lo que sucedió en esa ocasión, evitó disparar contra el centralismo de Buenos Aires.
Pullaro, por su lado, puso énfasis en la necesidad de restituir la obra pública. “Si este gobierno mirara más el trabajo y las rutas, entendería que las inversiones deberían ir ahí”, sostuvo Pullaro y pidió trabajar por el desarrollo nacional, algo que, cree, no fue prioridad ni del kirchnerismo ni de La Libertad Avanza, a los que calificó de “populismos”.
En esta línea, Sadir destacó la importancia de invertir en la actividad minera, que genera recursos tanto para su provincia como para Nación. Pidió por la baja de las retenciones para esta y otras economías regionales a fin de potenciar las inversiones en el sector y el empleo. Schiaretti ya había exigido la eliminación de las retenciones al agro, una propuesta que había generado un cruce en redes sociales con el presidente Javier Milei, luego de que el Gobierno redujera las alícuotas por períodos breves y limitados en el tiempo.
Como parte de esa reivindicación de las economías regionales y exposición sobre la diversidad productiva que engloba Provincias Unidas, Torres agregó: “La Patagonia que genera la mitad de las divisas que se vienen dilapidando sistemáticamente gobierno tras gobierno. El potencial energético que tenemos como país cuesta dimensionarlo”. En este contexto, llamó a revolucionar la matriz productiva y pidió votar por legisladores que defiendan los intereses de sus distritos. Fue un dardo hacia Mauricio y Jorge Macri por haber pactado con La Libertad Avanza en la ciudad, pese a que el Gobierno nacional aún debe fondos que corresponden a la capital.
Valdés fue el último orador y se encargó de resumir la propuesta de sus pares para la contienda del próximo 26 de octubre: “El único que puede pensar en programas productivos es el Gobierno nacional, pero hoy solo habla de finanzas. Este espacio político diverso (por Provincias Unidas) habla de producción, conocimiento y tecnología para salir adelante. Estamos dando el primer paso y pedimos que nos den una mano porque en unión y libertad vamos a construir ese futuro”, concluyó.
En la previa del acto, Valdés afirmó que Provincias Unidas busca ofrecer “una opción muy seria de construcción de la República” desde el interior de la Argentina hacia la capital y la provincia de Buenos Aires. Reivindicó su experiencia en gestión y la de sus pares y se mostró confiado en poder consolidar un bloque parlamentario. “Nosotros creemos que vamos a superar los 20 senadores nacionales. Vamos a construir una fuerza importante también de diputados”, dijo.
Es la cuarta cumbre conjunta de Provincias Unidas desde que arrancó la campaña para los comicios del 26 de octubre, pero la primera vez que visitan una jurisdicción que no conducen para participar de una actividad proselitista. Antes, se reunieron en Río Cuarto (Córdoba), Puerto Madryn (Chubut) y San Salvador de Jujuy. Ahora, esperan mostrar “unidad” y apuntalar el armado con miras al 2027, cuando buscarán impulsar un candidato presidencial.
Afuera del estadio, una murga con remeras blancas y rojas -los colores tradicionales del radicalismo– aguardaba la llegada de los candidatos y gobernadores. Con canciones de cumbia sonando sobre la Avenida del Libertador, los militantes se formaban en una fila que se extendía durante casi una cuadra para ingresar al predio.
“Me parece que Martín, que Graciela Ocaña, que Ciudadanos Unidos construyen una propuesta bien de centro y que tiene trayectoria en la defensa de la educación pública, de la salud pública, de los jubilados. Me parece que es una excelente alternativa y lo que tenemos que salir es de esta violencia absolutamente enraizada, que no contribuye nada. Hay que sanear esa grieta, tenemos que salir adelante. Creo que los candidatos de esta fuerza tienen con qué hacerlo”, afirmó Julieta Vitullo (53 años) a LA NACION. Milita en la UCR desde que tenía 15 años y aún conserva el mismo compromiso con el partido que en su juventud.
Al igual que los militantes, el dirigente de la UCR bonaerense Pablo Domenichini se acercó esta tarde a acompañar a los candidatos de Ciudadanos Unidos, la pata porteña del armado de los gobernadores. Domenichini integró la lista de Somos Buenos Aires para las elecciones del 7 de septiembre en la Provincia y que se referenciaba en la propuesta federal. La coalición que integraba apenas alcanzó el 5% de los votos en el resultado global de la provincia de Buenos Aires, pero ahora Domenichini se muestra más confiado en la posibilidad de romper la polarización y mejorar aquel resultado.
“Tenemos expectativas de tener una mejor elección. Es cierto que en la elección del 7 de septiembre, la polarización se llevó el 85% de los votos, pero creemos que hicimos lo correcto en términos de construcción política, de brindarle una alternativa al electorado y me parece que Provincias Unidas con el acompañamiento de los gobernadores, con una presencia federal, puede consolidarse de una mejor manera y tener un mejor resultado”, sostuvo en diálogo con LA NACION.