«Nos adaptamos a los requerimientos de las comparsas y asesoramos en todo el proceso»
Un innovador emprendimiento de plumas ecológicas ha comenzado a tomar fuerza en Esquina, Corrientes.
Carmen Garimberti, Andrea y Fabiana Sommaruga, se unieron con el objetivo de crear productos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente, inspirándose en su amor por el carnaval y su preocupación por la naturaleza.
Este proyecto nació hace dos años, cuando una de ellas, amante de los animales, propuso utilizar plumas artificiales en lugar de plumas reales, una tendencia que ya se había implementado en Río de Janeiro. Tras adquirir material, comenzaron a fabricar sus propias plumas ecológicas, con el propósito de concientizar sobre la no crueldad animal.
Las plumas ecológicas son fabricadas a partir de telas sublimadas, las cuales son plastificadas y ensambladas con varillas hechas de plástico reciclado de botellas. Cada pluma es completamente personalizable en cuanto a diseño, color y tamaño, lo que las hace ideales para comparsas que buscan un estilo único. «Nos adaptamos a los requerimientos de las comparsas y asesoramos en todo el proceso«, afirmó Andrea.
El emprendimiento ha recibido una gran demanda de diversas partes del país, incluyendo San Juan y Misiones, y esperan que la comunidad de Esquina y en la provincia también adopten esta tendencia. Uno de los grandes beneficios de estas plumas es su ligereza, lo que facilita el movimiento para quienes participan en desfiles.
El equipo invita a quienes estén interesados en contribuir al cuidado del medio ambiente sin sacrificar el glamour del carnaval, a contactarlas a través de sus redes sociales bajo el nombre «Plumas Ecológicas Corrientes», donde también pueden personalizar sus pedidos. Las emprendedoras destacan la importancia de promover este cambio de mentalidad y comenzar a valorar las alternativas ecológicas en todos los aspectos del carnaval.
El producto no solo es estéticamente atractivo, sino que además tiene la misma durabilidad que las plumas reales, aunque requiere ciertos cuidados, como evitar el contacto con agua. Sin embargo, es una opción viable y sustentable que promete marcar tendencia en futuros carnavales.
Este emprendimiento no solo es un ejemplo de innovación, sino también un llamado a reflexionar sobre el impacto que nuestras elecciones tienen en el planeta.
