Promesa a la bandera: cuándo nace la tradición y qué representa
Cada 20 de junio miles de niños y niñas de cuarto grado de todo el país prometen lealtad a la bandera. Se trata de un acto arraigado y que se lleva adelante en cada rincón de la Argentina, como una forma además de rendir homenaje al creador de la enseña patria, Manuel Belgrano.
El 13 de febrero de 1812 Belgrano le propuso al Triunvirato crear una escarapela con los colores celeste y blanco. La propuesta fue aprobada y el abogado enarboló la bandera a orillas del río Paraná un 27 de ese mismo mes. Además, hizo jurar a sus soldados en las baterías «Libertad» e «Independencia».
La promesa no se trata de una lealtad a un simple paño, es más bien un momento en el que todos los argentinos tienen la posibilidad de establecer un vínculo solemne que reivindica la bandera, realza la identidad y reafirman los valores como el respeto, la inclusión y la solidaridad.
A pesar de no existir una fecha precisa, esta tradición comenzó a fines del siglo XIX cuando Domingo Sarmiento trajo maestras de Estados Unidos, quienes adaptaban extraoficialmente las costumbres de jurar a la bandera a los establecimientos educativos argentinos. Fue para mediados de 1909 cuando una resolución del Consejo Federal de Educación institucionalizó estas prácticas.
