Se acerca el 1 de agosto, ya preparan la caña con ruda

Las clásicas petacas y otras presentaciones ya están a la venta. Este brebaje, al que se le atribuyen poderes sobrenaturales, será el gran protagonista el jueves de la próxima semana.

Ela Enríquez comenta: «Bueno, acá estamos, un año más apostando por lo que es el primero de agosto, el día de la Pachamama, para ofrecer la caña con ruda a todas las personas que pasan por la plaza. La preparación comienza un mes antes para que la caña esté macerada y la ruda le dé su característico sabor, cumpliendo así su función. Este año he preparado más botellas que el año pasado, ya que me quedé corta.»
Ela invita a todos a acercarse a su puesto en la plaza: «Los espero a todos. Ese día también vamos a tener degustaciones, y si quieren comprar tenemos botellas están totalmente herméticas y cerradas.»

Además de la caña con ruda, Ela también ofrece una variedad de productos caseros y hierbas medicinales. «Tengo manzanilla, ramitos de eucalipto y alcanfor para sahumar la casa, renovar las energías y alejar los males. También ofrezco hierbas medicinales como cola de caballo, anís y eneldo. Mis clientes, muchos de ellos del campo, siempre vienen a comprar sus hierbas mensualmente, y estoy muy agradecida por su apoyo.»

Tradición 

La tradición dice que la bebida sirve como protectora para evitar enfermedades del cuerpo y del espíritu, costumbre que llega desde antes de la Edad Media en Europa, con presencia fuerte también en la cultura guaraní. Hoy, el brebaje se toma en las casas y en los espacios públicos, como resultado de una revitalización de una costumbre que perdió fuerza en algún momento, pero que hoy tiene una gran llegada. 

Antiguamente, a fines de julio y principios de agosto, había un pico de muertes de ancianos, mujeres y niños por las grandes lluvias o por las heladas.  Además, con las condiciones desfavorables del tiempo se arruinaban las cosechas y la población pasaba tiempos difíciles en cuanto a la alimentación.  Por eso, para evitar y ahuyentar estos males, los pueblos originarios guaraníes comenzaron a tomar caña con ruda como remedio natural para espantarlos. Así nació esta tradición, que hoy continúa siendo popular.

Tanto es así que, cuando llegue el día, seguramente la pregunta obligada será: «¿Tomaste la caña con ruda?». La consulta se repetirá en las casas, en el colectivo, en el lugar de trabajo y casi en cualquier lugar donde haya dos personas conversando.

Muchos comercios aprovechan la ocasión y ofrecen también la bebida como cortesía a sus clientes. 

Además, esta costumbre se va adaptando a los diferentes tiempos. La pandemia y ahora la crisis económica son males que desean ahuyentar con el brebaje. Más allá de su efecto real, nadie se anima del todo a contradecir sus efectos beneficiosos y casi todos se animan a los tres sorbos en ayunas, aunque queme la garganta y haga arrugar un poco la cara.