Uruguay venció a Italia y se consagró campeón por primera vez del Mundial Sub 20
La Celeste se quedó el título en el estadio Diego Armando Maradona de La Plata gracias al cabezazo de Luciano Rodríguez a cinco del final.
Con gol de Luciano Rodríguez a cinco minutos del final, Uruguay venció 1 a 0 a Italia y se consagró campeón del Mundial Sub 20. El encuentro se jugó en el Estadio Único Diego Armando Maradona, de la ciudad de La Plata. De esta manear, los sudamericanos consiguieron su primer título en la historia de esta categoría. La Celeste se quedó con una victoria justificada mediante su gran desempeño durante todo el partido, donde arrinconó a los europeos, pero también por la garra que la caracteriza.
Fue así como a los 40 minutos del complemento, y luego de tanto insistir con fútbol y sacrificio, tras un tiro de esquina la pelota quedó bollando en el punto penal y luego de que Alan Matturro y Andrés Ferrari se choquen en su afán por convertir, el rebote lo tomó una de las joyas uruguayas, Luciano Rodríguez, quien cabeceó al fondo de la red.
Y justamente fue “La Perla” uruguaya, ese con el dorsal 19 que terminó lesionado por tanta entrega y que justo había quedado habilitado para jugar esta final tras cumplir dos fechas de suspensión. Gran acierto del DT Marcelo Broli por colocarlo de titular.
Fueron 11 las selecciones que lo ganaron. Entre ellas, Argentina y Brasil se encargaron de mostrarle al mundo el talento de sus jóvenes figuras al quedarse con once de las 22 ediciones disputadas hasta el momento. Ahora, sin embargo, fue Uruguay el representante del continente que se llevó a casa una copa que no consiguió y amplió el dominio de la región en este torneo.
Para la Celeste es una revancha que pudo cumplir, esa máxima de que “la tercera es la vencida”. Los sudamericanos disputaron las finales de Malasia 1997 y de Turquía 2013 y en ambos casos debieron conformarse con la medalla de plata. Los europeos, por fin, disfrutaron de jugar una final tras cumplir con ese mismo lema en el último triunfo ante Corea del Sur, donde sellaron su boleto al último juego después de caer en las semis de los últimos dos torneos que se disputaron.
El campo de juego se llevó el protagonismo por su terreno irregular principalmente en el circulo central y alrededores. Ambas naciones apostaron a ataques directos y centros pasados en las pelotas paradas. A los 22 minutos, Anderson Duarte tuvo la chance de abrir el marcador de cabeza pero Sebastiano Desplanches voló de gran manera para tapar la oportunidad y enviar la pelota al córner.
La Celeste presionó con todo su poder ofensivo a Italia en su arco y se hizo dueño total del partido durante la primera mitad. Las imprecisiones y la buena actuación de la dupla central europea fueron las culpables de que el combinado sudamericano no logre abrir el marcador. El encuentro se detuvo a los 42 minutos cuando los dos grandes protagonistas, Duarte y Desplanches, se cruzaron luego de una pelota aérea e intercambiaron patadas que no fueron sancionadas por el árbitro ni por el VAR. Al final de los primeros 45′, no hubo diferencias y el encuentro se fue 0-0 al entretiempo.
Uruguay salió con todo al complemento y en los primeros minutos avasalló a Italia, que mostró muchos desajustes defensivos que lo terminaron apremiando. La Celeste le faltó justeza en el pase y certeza a la hora de la definición. A los 12′, tras un córner, Alan Matturro tuvo su chance con un estupendo cabezazo, que se fue apenas desviada.
Italia prácticamente no atacó en toda esta etapa y para colmo sufrió la expulsión directa de Matteo Prati, a diez minutos del final, por una plancha sobre Fabricio Díaz. Sin embargo, desde el VAR lo llamaron al árbitro Glenn Nyberg y tras observar la imagen varias veces, cambió su decisión y optó por amonestar al mediocampista italiano.
La acción siguiente, Uruguay llegó a la tan buscada y merecida ventaja. El minuto marcaba los 40 minutos cuando tras un tiro de esquina la pelota queda bollando en el punto penal y luego de que Alan Matturro y Andrés Ferrari se choquen en su afán por convertir, el rebote lo tomó una de las joyas uruguayas, Luciano Rodríguez, quien cabeceó al fondo de la red.
El final fue electrizante. Italia amagó con reaccionar y con centros se acercó al arco bien custodiado Randall Rodríguez. Sin embargo, fue Uruguay el que no pudo conectar la acción de contragolpe que lo tuvo con cinco jugadores contra el arquero Sebastiano Desplanches, que finalmente se quedó con la pelota. Pero ya no había más tiempo y el título mundial juvenil de la categoría Sub 20 se queda una vez más en Sudamérica, y por primera vez lucirá en las vitrinas de la Asociación Uruguaya de Fútbol.
TyC Sports