Bajante histórica en la costa esquinense
La merma extraordinaria de caudales afecta a los cursos de agua en la provincia. La altura registrada ayer fue de 1,27 metros, estacionado, pero en baja en en ciudades como Goya y Bella Vista.
Sin expectativa de repuntes significativos en las próximas semanas, las bajantes de los ríos Paraná y Corriente se han acentuado en los últimos días, y ya pone en situación crítica la navegabilidad.
La postal de las Cataratas del Iguazú -con cascadas donde solo se aprecian hilos de agua-, cuyo caudal se encuentra reducido en el orden de la octava parte del valor normal de marzo, es una muestra elocuente de la bajante extraordinaria que experimentan los cauces de agua en tramos del territorio argentino.
El Instituto Nacional del Agua (INA) pronosticó que en los próximos días, el caudal del Paraná podría descender aún más, hasta podría superar el récord histórico local de 1,22 m.
Marcas bajas extraordinarias se repiten en ambas costas tanto por el Paraná como por el Corriente. Por la cuarentena, ambas postales costeras no pueden observarse personalmente, y solo se testimonian con videos o fotografías.