Banner de Video 551x93
PROVINCIALES

Prevención del Suicidio: «Cuando alguien está en una etapa de sufrimiento, de crisis no quiere llamar la atención, pide ayuda»

El programa Por la Vida en la provincia de Corrientes ofrece apoyo telefónico las 24 horas del día para escuchar, orientar y sugerir lugares de ayuda a personas en crisis. Es importante estar atentos a cambios en la conducta de los adolescentes y adultos cercanos, y prestar atención activa y presencial para brindar acompañamiento.

Entrevistamos a la Directora de Salud Mental de la provincia, la doctora Graciela Pianalto.

«Tiene distintas manifestaciones, hay personas que pueden llorar, hay personas que pueden hablar y hay personas que lamentablemente en realidad cometen distintos tipos de actos pero que en realidad muchas veces pasan desapercibidas ante el entorno familiar o cercano porque dicen o se mitifica digamos diciendo que está queriendo llamar la atención.»
«Cuando alguien está en una etapa de sufrimiento, de crisis no quiere llamar la atención, pide ayuda como puede digamos y en ese sentido es importante no solamente siempre una escucha atenta, una escucha activa sino también poder saber acompañar y poder digamos brindar orientación, ayuda y en ese sentido para eso está el programa Por la Vida en la provincia de Corrientes. El programa Por la Vida tiene una línea telefónica que es el número 135 que atiende 24-7, o sea las 24 horas, los 7 días de la semana, son profesionales capacitados para poder escuchar, orientar y a la vez también sugerir lugares de atención donde la persona puede tener una ayuda más cercana.
¿Ante qué síntomas o signos pueden los padres alertarse ante este pedido de ayuda?
Bueno, hay algo muy importante que justamente ya lo dijo usted, que tiene que ver con el entorno cercano y el adulto cercano inmediato, por ejemplo los padres, abuelos, tíos, los adultos que conviven con esa persona, especialmente con ese adolescente, hay que ver cuál es la cotidianeidad de ese adolescente, si hay cambios en esa cotidianeidad, en esa conducta virtual, cómo está su rendimiento académico, si va a un colegio o cómo está en cuanto al grupo de amigos o actividades de tiempo libre que hacía y deja de hacer o que de pronto está ensimismado. Hay ciertas conductas que en realidad tienen que ver con eso que últimamente al papá, la mamá, la abuela no le está cuadrando de algo que está pasando, y esos son los primeros síntomas o signos de alarma que es importante ver.

«En los adultos también ocurre de esta misma manera. Es muy importante esto que usted marca, Eduardo, porque en realidad usualmente cuando hablamos de persona en crisis, uno piensa a alguien que está, no sé, llorando, rompiendo todo, pateando, y en realidad ese es un tipo de crisis, es una crisis, digamos, por shock, por, digamos, por trauma, por una situación, digamos, que de pronto se estructura al momento que está pasando. Pero también hay otro tipo de crisis que son las crisis por agotamiento, es decir, la persona viene necesariamente atravesando distintas situaciones que lo llevan, como lo van cansando, situaciones que no va pudiendo manejar o lo va pudiendo manejar más o menos, pero de alguna manera eso también va afectando a la emoción y al sentimiento cotidiano. Y entonces de pronto la persona hace algún, como decimos los psicólogos, algún pasaje al acto, algún intento, y uno dice, pero si estaba bien

Por ahí también esta vorágine de trabajo, la incomunicación al estar uno mucho conectado con el teléfono hace que no le preste seguramente atención tanto a los amigos, a los seres queridos y se refugian también en ese mundo virtual.
«Exactamente, fíjense que tengo como muy fresco un ejemplo de, bueno, una amiga que estaba conversando conmigo y de pronto su hijo pequeñito viene y le dice, mami, si, decime qué te pasa. No mirame, le dice, pero te estoy escuchando. No mirame, le dijo. O sea, y esa cuestión que por ahí graciosamente dice un niño, o sea, llamando la atención a su mamá, en realidad en la comunicación es clave esto de poder realmente prestar atención. Y prestar atención tiene que ver con no solamente un lenguaje verbal, sino también un lenguaje no verbal. Mirar al otro no tiene que ver con mirar de costado, sino mirar en tanto realmente prestar esa atención que ese otro necesita en ese momento. Y para eso, digamos, la cuestión de la presencialidad es indiscutible. La presencialidad tiene un valor de acompañamiento que todavía ningún celular lo puede reemplazar.

 

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba