La senadora nacional Gabriela Valenzuela analiza la votación del DNU, las discrepancias dentro del radicalismo, la necesidad de autocrítica, el diálogo interno y la renovación de autoridades partidarias a nivel provincial.
«Sobre la reciente votación del DNU de la semana pasada y las divisiones dentro del radicalismo nacional, hubo dos frentes visibles. El concepto general fue muy complejo. Muy complejo. Como saben, incluso, desde la perspectiva del partido, lo vimos como algo inconstitucional, Desde ese punto de vista, si nos ponemos a pensar. Se plantearon diversas posturas, y de hecho, hubo muchas discusiones dentro del bloque. Cuando vimos que era sumamente complicado, y entiendo la posición también de nuestro presidente del partido, Martín Lousteau, es comprensible, más allá de nuestros esfuerzos, donde insistimos en que desde el bloque, como políticos radicales, para evitar que luego se haga una lectura negativa, pedimos que todos votáramos en la misma dirección. Considerando que todos nuestros gobernadores, que hoy en día son muchos, líderes territoriales, gobernadores e intendentes, era importante que diéramos un paso adelante y proporcionáramos las herramientas que el gobierno nacional necesita para actuar. Aunque es cierto, y esto también es importante destacarlo, que un DNU con 300 y tantas páginas, o con 80, 80 leyes que iban a modificarse, era difícil porque, recordemos que no podemos desechar lo que está funcionando bien para nosotros, de hecho, muy bien. Desde un principio dijimos que íbamos a apoyar la reforma laboral para mejorar ciertos aspectos, pero como no nos permitieron abrir un debate, mejorar esas partes que no estaban tan bien, se volvió complicado. Bueno, así se planteó la situación, por eso decidimos liberar el voto de cada senador dentro del partido, para que cada uno vote conforme a su conciencia, Considerando lo que, desde su perspectiva, inclina la balanza de forma positiva. Así lo entendí yo. Y bendecimos a los demás senadores por esta decisión, porque creo que es importante apoyar y respaldar a nuestros gobernadores, algunos de los cuales lo están pasando realmente mal. Por ejemplo, aquí en Chaco, como saben, recibió una provincia devastada y es necesario contar con herramientas que les permitan salir adelante. Por tanto, esto tiene que ver, no con un quiebre en el radicalismo a nivel nacional, sino con diferencias de opinión respecto al DNU y la ley de bases.
«Sí, y en cuanto al partido, creo que como radicales merecemos y debemos realizar una profunda autocrítica, es algo que debemos hacer sin dudas. Para avanzar, considero que debemos tener muy en cuenta el progreso que está haciendo el Estado en las provincias. De hecho, perdimos un número significativo de gobernadores, que son figuras importantes, muchos líderes territoriales, ya sean independientes o concejales, pero creo que es esencial que todos nos examinemos a fondo. Creo que la comunicación dentro del partido es necesaria en todos los niveles. Se está hablando incluso desde la Comuna, desde la Ciudad de China, creo que todos los dirigentes son importantes, todos debemos contribuir a este diálogo que todos merecemos. Solo unidos, juntos, podremos sin duda llegar a un punto común.»
Bueno, quiero hacer especial hincapié en las internas. El próximo año tendremos cambios legislativos, de gobernadores, de intendente, de concejales, se renovará todo el organigrama, y considero que es importante que todos dialoguemos. A nivel nacional también necesitamos que todos estemos observando, discutiendo, dialogando, y eso es la base de nuestra nueva comunicación y de un consenso más amplio.
Gabriela, ¿cómo puede afectar esto a nuestra provincia? Hablas de las elecciones de 2025, ¿cómo está el radicalismo a nivel provincial, con dos líderes muy fuertes, como el exgobernador Colombi y el actual Gustavo Valdés? ¿Tendrá algún impacto?
«Sí, definitivamente tendrá un impacto, es posible que influya el gran liderazgo que tiene nuestro exgobernador, que es una figura muy importante y fuerte. Creo que eso va a ser relevante aquí. En lo personal, yo también estoy totalmente de acuerdo, no hay contradicción, por supuesto. En cuanto a lo provincial, nadie me ha mencionado o informado sobre alguna otra intención, al contrario, todos parecen estar dispuestos a trabajar juntos, considero que ahora es el momento para que el gobernador actual, Gustavo Valdés, demuestre su liderazgo. Creo firmemente que va a ser así. Además, creo que en todas las comunas donde se están llevando a cabo conversaciones, habrá un gran consenso y una renovación de las autoridades del partido. Pronto tendremos las elecciones, en mayo, y seguramente veremos esas renovaciones en el partido, como se ha mencionado.»
¿Habrá elecciones internas?
Sí, se deben convocar elecciones internas, porque los plazos así lo exigen. Por eso quiero recalcar, ahora mismo no tengo la fecha exacta en mente, pero tengo entendido que en abril o mayo, en un mes, deberíamos estar listos para convocar a las elecciones internas. Es un proceso administrativo importante que debe llevarse a cabo en el partido. Es esencial para que podamos escuchar a la sociedad, no solo a los que tienen derechos políticos, sino a toda la sociedad que espera algo de los dirigentes políticos. Creo que ese es un paso importante, que requiere madurez política de todos los dirigentes, para llegar a un consenso sobre las personas que nos representarán a todos los radicales, y que dirigirán el rumbo del partido.»
